Porque hay a quien le gusta el olor reciente de un café cortado. Porque hay quien grita "touché!" cuando se encuentra una mirada diferente. Porque cruzar en rojo da la vida y con los ojos cerrados se llega antes a ese otro lado adictivo, furtivo y agridulce. Porque las entrelineas guardan los secretos y ayudan a imaginar. Bienvenidos, pasen y lean...

24 septiembre 2007

A RATOS


Me apeteces a ratos,
intercalado tú y tu pecho
entre el silencio taquigráfico de mi sexo
y el gemido de los buitres
que viven en mi alféizar.
Me apeteces a ratos
infinitos,
circulares...



Fotografía de Aitor Martín

17 septiembre 2007

CAÓTICA YO

Caótica yo, cuando entendí que el caos no era amor
Porque me descoloca el olor de tu cosmos, ese sabor
Caótica cuando entiendo que el caos lo llevo yo
En la cabeza, en la puta cabeza...
Caótica, sentada en la estación mientras llueve
Y un remolino de disección aprieta y se mueve
Y lluevo yo, y no sé, y no sé, y no sé...
Caótica de camino, te leo, te releo, sonrío...
Y los carteles me alquilan en las paredes
Salgo y entro en ciencia-ficción, en hoteles
Caótica yo porque el volante me viene grande
Porque las princesas bacanas prefieren flotarse
Porque ahora me siento más tonta, más sola
Caótica yo porque no sé, no sé, no sé...
Porque me escuece el labio y hoy no me he peinado
Por querer controlar, analizar lo que no debo
Por masticar en mil trozos lo que se traga entero
No lo cambio, porque así está bien aunque dé miedo
Caótica yo con el ombligo de almohada
Caótica yo con tu voz a la espalda
Caótica yo con besos en el cuello
Caótica yo, estúpida sin argumentos
Y no quiero
Hoy no mastico
No lo pienso
Es más fácil
Cerrar los ojos
Dormirte cerca
A cuatro brazos
No lo pienso
Hoy no mastico
Cerrar los ojos
Deja que pase
Caótica yo...
Deja que pase

09 septiembre 2007

TE SIENTO AQUÍ


-Odio el sonido del viento que se cuela por las rendijas de la ventana. Parece silbar, gritar que la madera está descolorida, cansada, que se muere por un sorbo de pintura.
¿Es posible que con el tiempo el eco haya crecido?
En cambio las malditas gardenias están secas, casi tanto como yo.

-¿Por qué ya no me miras a los ojos? Estás ausente. Me ignoras.

-Y no es por no pintarlas.
¿Cuántas cucharadas de azúcar le he puesto al café? Últimamente estoy como drogada, no se lo que hago
.

-Tengo frío.

- El café, el café lo cura todo.

-¿Hace cuánto que no hacemos el amor?

-Dos años, dos años insípidos, vacíos. Parece mentira como pasa el tiempo;
y sin embargo las paredes me engullen lentamente, las horas me mastican las ganas, lo de dentro se me muere poco a poco...

-Tengo frío.

-Creo, creo que debería cambiar las cortinas. Un poco de azul le iría bien; como un mar Muerto en la cocina, como mirar olas mientras el estúpido café pierde grados, al mismo ritmo que mi piel pierde tersura, al ritmo que el mantel blanco de la mesa amarillea... Quizá debería dejar de usar lejía. Creo que hay un producto nuevo.

-Nunca te lo he dicho, pero te extraño. Te quiero.

-Dos años, sí, dos años, dos kilos de cenizas, y una urna encima de la mesa del salón.
Dos malditos años hablando sola en la cocina, mientras tomo el café de las cuatro, y sin embargo te siento aquí.

03 septiembre 2007

DESNUDA Y QUIETA

Después de arañar con saña los rincones asfaltados
De vender, de subastar el cariño inocuo que me dan
Después de morder cien corazones para desayunar
Respiración entrecortada, lengua absurda de cristal...
Desnuda y quieta...
Desnuda y quieta...
Y no es más puta la que busca compañía a toda costa
En pliegues de charol, de lata, de latón, bajo la vía
Y no es más puta muerte súbita que intoxicación de vida
El frío no me mata, es el maldito viento en diagonal
Perros vagabundos con dientes de metal de doble filo
Vendiéndonos la nuca, inyectando cicuta en el gotero
Y un te quiero en el tintero para no gastar ni huella digital
Mi yugular a prueba de bomba, de terrorismo personal
Epidemia de poesía sin poeta, lengua absurda de cristal
Desnuda y quieta...
Desnuda y quieta...